Editorials
From Stet Literary Magazine, Fall 1991- Federico García Lorca
Se ha dicho que si bien no es el más auténtico, Federico García Lorca, es el más penetrante de los poetas de su generación. Lorca vlogró, desde su primer volumen de poemas líricos, despertar el neopopularismo. Mas tarde lo llevaría al plano universal. El Romancero gitano se canta en España como parte intrínseca del folclore nacional. El sentimiento tradicionalista en su obra lo hizo centro del afecto de la España que recorrió con sus compañeros de La Barraca, esa era la España de Impresiones y Paisajes. La de Francisco Franco y Largo Caballero, la de José María Hinojosa y Rafael Albertí le respondió con una bala en la cabeza. La política, la apasionada y virulenta España, esa a la que Lorca jamás calculó, lo asesinó y posteriormente manipuló su imagen. Lorca cenaba con Primo de Rivera, fue cofrade activo en Granada de Santa María de la Alhambra y asistió a reuniones donde su amistades cantaron La Internacional. Federico era totalmente español-como en cierta ocasión declaró-pero también dijo y demostró que era hermano de todos los hombres.
Por encima de todo esto su poesía y su teatro lo destacaron como figura representativa de España. Dictó conferencias en América y en Nueva York escribió su libro más crudo y desgarrante, su primera impresión de la muerte mecanizada que adoptó un matiz surreal. Los meses que vivió en esta ciudad la confusión y el frío espiritual de una época en marcha hacia la deshumanización no le impidió expresar con claridad el futuro, que de cierta manera es la poesía.
De toda su obra quizá Poeta en Nueva York es la que más nos identifica con él y no podemos evadir pensar que esta ciudad, caracterizada por la violencia y la gélidez total le hubiese permitido existir libremente para llevar a aquella España que lo asesinó a niveles más humanos y universales por medio de la literatura. Sesenta y cinco años después de caminar por estas calles, desde Nueva York STET presenta este homenaje como testimonio de que Lorca jamás nos ha abandonado.
Political Reporter # 31 Editorial
Una vez más Union City es la sede de otro conflicto político. El alcalde de Union City, Brian Stack, reta al asambleista estatal Rafael Fraguela por el asiento en la asamblea. Al mismo tiempo un grupo de rivales de Stack intenta organizar un recall contra el alcalde. El recall está fuertemente apoyado por los dueños de los bares de la ciudad, quienes se han molestado con el alcalde porque impulsó una ordenanza municipal en la cual se estipula que tienen que cerrar los bares un hora más temprano. Esta medida está proyectada ha mejorar la calidad de vida de la ciudad, ya que a altas horas de la madrugada, específicamente la ultima hora en que estaban abiertos lo bares, es que se realizaban la mayor cantigdad de llamadas a la policía a consecuencia de las broncas, los escándalos, vandalismos y personas orinando en la calle-muchas de estas personas no viven en Union City, sólo venían a los bares a beber- enfureciendo a los residentes de la ciudad, quienes lanzaron sus quejas al alcalde y los comisionados. En rigor, esta fue una medida que muchos residentes venían pidiendo por largo tiempo. Porque ningún padre de familia, ninguna madre, ni persona que quiere vivir en una comunidad segura y tranquila quiere tener que lidiar con borrachos que orinan en las calles próximas a sus casas, ni con situaciones de broncas que ponen en peligro la tranquilidad y hasta la vida de sus hijos y las suyas propias.
Algo curioso y revalador en esta situación es que el hombre que dirige este intento a recall es un educador. Un educador que pone el interés de los dueños de los bares ante la seguridad, la tranquilidad y la calidad de vida de los estudiantes y padres y madres trabajadoras de esta ciudad.
Algo que Stack ha expresado lo molestó fue el hecho de que uno de los asistentes al asambleista Fraguela estaba apoyando el recall contra el alcalde. Es natural entender porque el alcalde reaccionó ante este hecho. Hay que tener en cuenta que el asistente al asambleista es dueño de un restaurante en la ciudad, por lo tanto estaba defendiendo sus intereses al unirse a otros dueños de bares y establecimientos donde se venden bebidas alcohólicas. Sin embargo, su posición-a la cual renunció-como asistente al asambleista despertó fundadas sospechas en el alcalde Stack, quien se vio atacado por el asambleista de manera indirecta. Además, el alcalde venía cuestionando la capacidad de Fraguela como asambleista, llegando a declarar recientemente que él (Stack) es el que ha tenido que tomar tiempo de su trabajo en Union City e ir a Trenton en varias ocasiones para resolver los problemas de la ciudad, siendo este el trabajo de Fraguela.
Esta situación va más allá de las acusaciones de uno u otro lado, más allá de personalidades y de las tradicionales riñas personales que siempre aparecen en la política local. Esta situación, que la decidirán los votantes de este distrito, está centrada en los records de estos políticos.
Es imposible olividar que fue Rafael Fraguela el que subió los impuestos de esta ciudad SIETE VECES mientras era comisionado bajo la protección de la organización Alianza, la cual controló de manera dictatorial el destino político de esta ciudad por muchos años. Fraguela era uno de los protegidos de esta organización. Un producto de maquinaria política, no del voto popular ganado por él mismo. En esta base se puede resumir su carrera política. Sus logros en la asamblea son desconocidos para la mayoría, han brillado por su ausencia, y es que no se le puede pedir a un político que ha desarrollado su imagen bajo la sombra de una maquinaria política que comience a actuar como un líder en un santiamén, porque no lo es.
Es imposible olvidar que Brian Stack se enfrentó en 1998 a la maquinaria que amamantaba y críaba a políticos como Fraguela, siempre y cuando contaran con su inquebrantable lealtad. Stack llegó a derrotar y disolver a esta maquinaria con la fuerza de su trabajo y el consecuente voto que ha llegado a lograr en las elecciones municiaples y de Freeholder. Stack ha salido adelante con el apoyo del voto popular. Es un líder, no un producto de una maquinaria política. Sus medidas en Union City están concentradas a mejorar la calidad de vida de la ciudad y a sacarla adelante después de años del control, la corrupción, el abuso con los impuestos y los amiguismos políticos del reciente pasado. Es lógico concluir que miembros de la vieja guardia se opongan a Stack, organizando pequeñas conspiraciones, recalls, y otras marañas. El record de Stack como líder de la ciudad es claro como el agua: ha puesto más policías en las calles. Ha frenado el despilfarro en la municipalidad, ha mantenido los impuestos estables y su meta es bajarlos y lo logrará. Ha trabajado fuertemente con la gran diversidad étnica que enriquece a Union City. Y continúa trabajando SIETE DIAS a la semana, tratando de ayudar personalmente a todo el que toca a su puerta. Los intentos de tapar el sol con un dedo de parte de sus rivales políticos no pasan de ser una falacia, una treta sin base, una maniobra apoyada por intereses, diferencias personals y envidia.
Esta contienda la decidirá usted, el votante de esta ciudad y las ciudades que conforman el distrito estatal. Usted irá a los records y podrá ver nitidamente quien está mejor calificado para ocupar el asiento de asambleista, quien luchará más por usted, quien es el líder interesado en ayudarlo y quien es el político profesional, quien es capaz y quien ha hecho de la incapacidad política y comunitaria una carrera de fotos en los periódicos, placas de reconocimiento y comelatas repletas de vacilantes y vacíos discursos perdidos en el aire.
Political Reporter Editorial 2001
Union City se haya enfrascada en los vaivenes de la política que caracteriza a Hudson Coun-ty. Es muy posible que se avecina un recall contra el alcalde Rudy García. Dicha gestión, lidereada por el freeholder Brian P. Stack tiene como base el argumento de que, bajo García, la ciudad ha perdido el liderazgo. Los una vez amigos, ahora rivales o siempre rivales del alcalde, los trabajadores políticos y los que dependen de la política por beneficio, aunarán fuerzas para remover a Rudy García de la alcaldía.
Uno de los aliados más fuertes que tiene la avanzada del recall es el hecho de que se ha producido un incremento de impuestos que ya está afectando notablemente los bolsillos de los residentes. Existen otras razones que meritan la gestión política. El flamante asesor político del alcalde, Pat Politano está siendo investigado por el FBI por asuntos financieros que responden a contratos y sueldos recibidos bajo la administración del alcalde. La investigación federal cobra fuerza asi como se van descubriendo pagos hechos con fondos de la Organización Democrática de Union City, uno de éstos es un cheque pagado al ayudante del alcalde por la cantidad de $20,000 antes de que éste se mudara del estado. Un inspector de la ciudad ya ha sido acusado por aceptar dinero ilegalmente en cuestiones relacionadas con su trabajo como funcionario oficial de la ciudad.
Junto a esto se añade el estado financiero de Union City, que debe 11 millones de dólares. Los residentes se quejan del crímen, de los parquímetros, de las calles sucias, de los parqueos poblados de automóviles de otros estados, esto último se solucionaría con una ordenanza de zona residencial de parqueos. Sin embargo, lo que más preocupa a los residentes de Union City son los impuestos de propiedad, que de continuar subiendo, despoblarán a la ciudad de los pobres; solamente personas de alto nivel económico podrán financiar casas o pagar las rentas que, inevitablemente, subirán.
Encima de todos los problemas que azotan a esta pequeña ciudad sobresale, como es típico en el Condado de Hudson, la rivalidad política entre el Freeholder Brian P. Stack y el alcalde Raúl “Rudy” García. Esta rivalidad comenzó cuando la organización fundada por ambos “Unidad” se fue a pique ante las quejas de Stack, quien argumentó que el alcalde no lo escuchaba y que él no podía continuar contemplando como García arruinaba la ciudad sin hacer nada al respecto. Esto causó una división en la lealtad de los comisionados. Rafael Fraguela, quien lidereó la oposición a García, fue respaldado por Michael Leggiero y Tina Yandolino, despojando al alcalde de su poder y uniéndose a Stack-con el respaldo del congresista Menéndez-para eliminar a Rudy García de su posición de alcalde, para después darle “el puntillazo”, sacándolo de la asamblea.
Los que argumentan a favor del recall tienen sólidas bases para apoyarlo, si se trata de lo mencionado arriba. Por otra parte los que defienden al alcalde ven en Stack, no ya al líder independiente que una vez inspiró a miles de seguidores a enfrentarse a la maquinaria, sino a un miembro de ésta, que ha puesto sus ambiciones personales ante la posibilidad de alcanzar un acuerdo con el alcalde y los comisionados para salvar la situación inmediata. Es necesario señalar que todos expresan sus intenciones de trabajar en pos de una solución que mejore las condiciones de la ciudad. No obstante, por el medio se aferran las diferencias políticas que parecen ser insalvables. Esto está demostrado en los mitines de comisionados, que en muchas ocasiones están cargados de acusaciones, contra acusaciones y hasta ataques a nivel personal. Está claro que, de actuando de esta manera, no resolverán nada.
Se ha argumentado, por parte de los opositores de remover a García del poder, que detrás del recall se mueve una fuerza anglosajona que desde hace años sueña con retomar el poder de esta ciudad. Algo que no podemos ignorar, no por parte de Brian Stack, sino porque el sentimiento anti hispano es tan palpable en Union City como lo es en el resto del país, por mucho que se trate de fingir. Se añade a esto el señalamiento de que Stack puede fácilmente esperar al 2002 y formar su propio ticket contra el alcalde. Esto no parece ser lo que se divisa en el horizonte político de Union City, pero si éste fuera el caso, se puede esperar que más de dos tickets aspiren a correr en esas elecciones. Un tercer ticket en el 2002 atacaría tanto la ineficacia de García como lo que denominarían “la ambición” de Stack y aunque Stack realizara cambios positivos, en dos años le será practicamente imposible resolver los múltiples problemas que enfrenta Union City.
Por su record de incansable trabajo comunitario, Brian Stack merece una oportunidad para manejar el destino de la ciudad. La pregunta que los ciudadanos tendrán que enfrentar en el recall es: ¿Si le conceden esta oportunidad a costa de negarle a Rudy García el derecho de finalizar su término?
Political Reporter #20 Editorial
Si usted analiza las contradicciones de los mensajes mixtos con que nos bombardean diariamente, llegará dos conclusiones: nos están mintiendo para tapar un gran desastre o se están burlando de nosotros. Por ejemplo, tome usted el asunto de la bolsa de valores y el estado nervioso que crean los especuladores en combinación con las agencias informativas y compárelo con las noticias una brillante economía, un surplus cuya cantidad mantendría a este país en estado sólido por los próximos diez años. Es un contraste asombroso. Por un lado nos aseguran el el gobierno de Clinton había realizado maravillas en la economía del país, ahora, en unos cortos meses, estamos amenazados por una crísis que pone a todo el mundo a correr, vendiendo sus shares o sacando el dinero de la bolsa de valores. Por otro lado, la gasolina no bajó de precio, la luz y el gas por el cielo, para pagar la hipoteca de una casa tiene que trabajar hasta la abuela, los artículos de primera necesidad suben, un automóvil nuevo es algo asi como una inversión en una propiedad y… los seguros, ni hablar de los seguros. ¿A dónde está la mejoría, a dónde está el surplus y la maravillosa economía? ¿Qué validéz tiene el mensaje oficial? ¿A dónde fueron a parar las promesas-hechas realidad en boca de muchos-de las campañas presidenciales de los últimos dos términos? ¿En qué quedó el famoso “puente hacia el siglo XXI”?
¿Qué sucedió con la reforma en el campo de la medicina y con la reforma educativa? Específicamente en el estado de New Jersey, podemos citar las promesas de la ex gobernadora Whitman cuando se comprometió a bajar las criminales tarifas de los seguros de automóviles.
Los impuestos de propiedad en algunas empobrecidas ciudades del Hudson County se asemejan a los que pagan los residentes de los más exclusivos barrios de California.
Lo curioso de esto es que ya existen personas que aseguran que George W. Bush, en unos cortos meses ocupando la presidencia, es el causante de muchos de estos problemas.
El legado de Clinton ha sido verdaderamente patético y no estamos hablando del problema moral solamente. Si se realizaron todas estas maravillas en ocho años ¿por qué poner al país en estado de sitio económico? ¿Por qué, de un día a otro la bolsa de valores tambalea y grandes corporaciones comienzan a despedir a miles de empleados?
Mientras tanto, los ciudadanos continúan consumiendo. Si usted va a un Mall está repleto. Si usted va a un cine o a un concierto de rock, o a un casino o a comprar el periódico en la esquina, encontrará a muchas personas gastando su dinero-y el que no tienen-en juegos de azar, en lujos innnecesarios, en artículos que jamás usarán o que usarán por un día. También se gasta una astronómica cantidad de dinero en drogas. Y en pistolas, rifles y todo tipo de armas. Y en fiestas. Y en regalos. Y la economía temblando y todo el mundo gastando.
Algo está mal en este cuadro.
Sin embargo, se puede llegar a algunas conclusiones. La disparidad entre el mensaje y la realidad abre el camino de la duda. O todo este nervioso teatro es una ilusión más que forma parte del sueño américano-que puede fluctuar entre estado de estupor o pesadilla-o el estado de las cosas está a punto de estallar. Mientras fluctúa la bolsa se vende más, se gasta más. El pasado año los norteamericanos se endeudaron por la cantidad de un trillón de dólares usando tarjetas de crédito. Mucho de este gasto es promovido por la misma prensa en tiempos de fiestas navideñas. Al mismo tiempo cada día entran más emigrantes, que a su vez procrean nuevos ciudadanos. La población crece, es gasto aumenta, los precios suben, la diferencia entre el dinero que gana un 10% de la población y el resto es inquietante. Las compañias de tarjetas de crédito dictan leyes en el congreso, el cual el pasado mes se convirtió en el cobrador-policía de éstas, pasando una ley diseñada en 400 páginas (que la mayoría de los políticos no leyeron) por los magnates del plástico. Todo el mundo se queja. Todo el mundo quiere venir para este país. Y el billete sigue corriendo. Y el globo, como una olla de presión continúa inchándose.
Es un asunto de sentido común pensar que en algún momento el globo estallará si no se controlan las epidemias. La epidemia de las drogas, la de una industria médica materializada, la de una sociedad donde los valores humanos han tomado un segundo lugar al dinero, la de un país que celebra la violencia y la inculca en nuestra juventud por medio de la televisión y el cine. Si no se controla el hecho de que una gran parte del universo está esperando el momento oportuno para emigrar a Estados Unidos. Si no se ejerce una conciencia de compromiso con la verdad en los medios informativos y se continúa con la política del abuso del poder corporativo, mientras gente como los Clinton dictan la pauta a seguir a las nuevas generaciones, no hay que ser un genio para percatarse de que esto no va bien, aunque las luces y el dios tecnológico y los buropolícratas en sus empanadas demagógicas nos repitan una y otra vez que el futuro jamás ha estado más cerca del éxito. No hay que ser un economista para entender que entre lo que se dice y lo que está sucediendo en la bolsa de valores, en el sistema educativo, en los centros de $alud, en las calles y los corredores del capitolio de este país es un claro síntoma de decadencia, cuyo diagnóstico no es precisamente saludable.
Political Reporter # 15 Editorial Educación
Un agobiante dilema se ciñe sobre la Educación Nacional y los más afectados somos los hispanos. Mientras se promueve la educación y se subrraya la necesidad de maestros en el país, un alarmante número de hispanos dejan las escuelas antes de completar el High School. Los políticos verborrean soluciones de campaña y después lamentan las condiciones de nuestras escuelas y el bajo nivel en los resultados de los exámenes a que son sometidos los estudiantes. Luego de pasar su tiempo en oficinas públicas, vienen otros políticos y repiten las mismas promesas y consignas. Este es el fenómeno de la poliducación .
Las condiciones socio-económicas juegan un papel vital en el desarrollo educativo. Un estudio del National Center of Education Statistics revela que elementos raciales, sociales y económicos afectan la diferencia de quien está logrando un mayor nivel educativo y quien rompe los estudios a temprana edad. Mientras el 6% de estudiantes de familias de altos ingresos dejan las escuelas, un asombroso 40% de estudiabtes de familias pobres no continúan educándose. Los hispanos estamos en primer lugar de la lista. Jóvenes latinos dejan la escuela hasta en un 80% en algunas regiones del país.
Deficiencias económicas y sociales, problemas con el idioma, racismo, discriminación e insensibilidad cultural son algunos de los factores vitales para las alarmantes cifras. Una complejidad de factores juegan un papel esencial en esto, incluyendo la indiferencia con que son tratados los hispanos y las minorías en el sistema escolar.
Cada año la diversidad cultural se expande en esta tierra de emigrantes. Cifras reveladas en los años 1994-95 revelan que durante ese tiempo 3.1 millones de niños fueron identificados como LEP, o sea niños con limitaciones en entender, hablar o escribir en inglés. Esto es equivalente al 7.3% de la población escolar total desde Kindergarten al grado 12. Para 1996 esta cifra incrementó un 5%. Después de los resultados del censo 2000 se estima otro incremento de por lo menos un 10%. Se estima que de todos los emigrantes que cada día arriban a este país el 90% no hablan inglés, de esta cantidad la mayoría son hispanos.
Los distritos tienen la responsabilidad de manejar sus correspondientes sistemas educativos según estima conveniente limitadas leyes federales. El verdadero poder radica en los estados. Esto beneficia en su mayoría a la cultura dominante. Algo parecido sucede con los exámenes estatales. Cierto es que vivimos en este país, pero no teniendo los distritos pobres el mismo acceso a alta calidad educativa somos las minorías las que pagamos. En distritos con mayor diversidad cultural-donde los hispanos ocupan posiciones electas, como Union City o Elizabeth, los hispanos y otras minorías se benefician de la atención que prestan los oficiales electos a los problemas que enfrentan los que comienzan a aprender un nuevo idioma bajo una cultura extraña, en comparación a otros distritos donde los hispanos no han desarrollado poder político. Aún asi existe un desbarajuste en la educación, y no se trata solamente de discriminación ni racismo.
el maestro
La mayoría de los ciudadanos ven al maestro como un educador, cuyo trabajo es enseñar y prestarle todo el tiempo a nuestros hijos. Esta es la esencia de su trabajo. Lo que ignora la población es la tonelada de papeles, bajo la exigencia de los distritos, a que son sometidos los educadores. Y esto van en incremento. Algunas exigencias y regulaciones bordean en lo ridículo. Asi aumenta el papeleo y la burocracia, aumenta la frustración del verdadero educador, cuya tendencia natural es enseñar, no llenar papeles, colectar datos, regirse por cualquier tipo de experimentos educativos que trearán aún más papeles, al mismo tiempo que los supervisores educativos se multiplican ejerciendo una enorme presión sobre ellos para completar las complicadas formas que satisfagan tal o más cual idea cuyo origen pudo bien haber nacido en la mente de personas, que habiendo pasado del aula a la oficina, parecen haber olvidado la importancia de enseñar.
El papeleo se ha convertido en una tortura. El educador tiene que pegar papeles en las paredes de las aulas, llenar formas, realizar exámenes que demanda el estado o el distrito regidos por inflexibles fechas, tener todo robóticamente organizado, las pizarras tienen que tener específicas frases, complicados indicadores ennumerados, todo esto tiene que reflejarse también en los lesson plans o planificación de lecciones. A todo esto se añade la actitud de algunos Superintendentes de Escuelas, que en algunos lugares actúan como caciques locales, ostigando a los principales, éstos a su vez, se ven entre la espada y la pared, porque tienen que presionar a los maestros, a la vez que entienden que éstos no dan para más.
Estas actividades interrumpen directamente la salud de la relación entre maestro y estudiante, que es el fundamento de la educación. Después de tanto papeleo y tanta burocracia, está la vocación de enseñar, la cual los profesionales de la enseñanza practican con el ejército de supervisores, evaluadores y observadores arriba de ellos. La diferencia de sueldos entre estos burócratas y los maestros es astrónomica. Los peor pagados en el sistema educativo son precisamente los que llevan toda la carga y los que desempeñan la labor más importante: educar a su hijo o hija, con dedicación. disciplina, dignidad humana y amor.
el reto social
Encima de esto la sociedad se ha enfrasacado en enviar un mensaje de desafío y violencia. Mientras los maestros luchan por inculcarle las más nobles virtudes a los niños, el cine, la televisión, los noticieros y el medioambiente celebra lo peor del ser humano. Aunque existe una respuesta de algunos sectores sociales que crean un escaso balance, llevando mensajes saluidables para la formación de los que en el futuro llevarán la responsabilidad de conducir el destino de nuestra gran democracia, impera el materialismo, la carrera hacia la fama, el dinero rápido, el desafío a las instituciones que crean la base de una sociedad civilizada. Nuestros jóvenes quedan a merced de las vulnerabilidades de la inexperiencia y de los que manipulan la información promoviendo las características más débiles del ser humano. Este es un verdadero reto para los educadores, quienes ni siquiera pueden poner como ejemplo la más alta oficina del país para enseñar que el duro trabajo, la dedicación, el nivel educativo y la sinceridad, llevan al camino del respeto y del éxito. Si el presidente de Estados Unidos comete adulterio y le miente a la nación, no le hes fácil al educador el valor de la lealtad, de la sinceridad, porque justo o injusto, el estudiante tendrá su mayor defensa en la conducta del hombre que ocupa la oficina más alta del país. Las aulas no están excentas de la decandencia social.
Solamente en este aspecto la labor del maestro es de extrema importancia. Sin disciplina, sin control de una clase, sin patrones de conducta, es imposible enseñar. Añádale a esto la legión de supervisores, el ostigamiento de las regulaciones del estado y del distrito y el consecuente papeleo-con sus inextrincables fórmulas-y entenderá el lector porque tenemos una crisis educativa.
En Nueva York se necesitarán 54,000 maestros en los próximos 5 años. Recientemente pudimos ver y leer como los estudiantes atacan físicamente a los educadores, practicamente con impunidad. Para el 2002 se estima que retirarán un millón de maestros en la nación. La mayoría con vasta experiencia, muchos totalmente necesarios, Sin embargo optan por el retiro antes de enfrentar tanto la falta de respeto y la violencia de los estudiantes como la falta de apoyo y el camión de papeles y exigencias de los gobiernos estatales y los distritos. Con toda esta alarmante situación nadie propone que se reduzca la cantidad de papeleo, presiones y puestos administrativos en el sistema. Quizá simplificar sea parte de la cura para la crisis que enfrenta la eduación en los Estados Unidos. Pero: ¿Quién le pone el cascabel al gato? Quizá un viraje hacia lo tradicional, en términos humanos, una campaña de disciplina y respeto hacia el maestro no sólo de parte del estudiante, sino de parte de todos los sectores de la sociedad, brinden parte de la solución.
Una intensa campaña de humanismo sería capaz de lograr mucho más que todos los estudios y soluciones académicas que hasta ahora parecen haber exracerbado la crisis.
Los hispanos continuamos en el fondo del barril académico. Esto resulta en el dramático índice de pobreza, dependencia del gobierno, adicción a las drogas, alto grado de jóvenes que salen en estado sin estar casadas ni tener la educación para mantener a sus hijos, padres irresponsables, membrecía en las “gangas” y un catálogo de males que hará del futuro un pedregal en vez de un camino hacia el éxito.
STET Editorial IV (1991)
Se ha dicho que si bien no es el más auténtico, Federico García Lorca, es el más penetrante de los poetas de su generación. Lorca logró, desde su primer volumen de poemas líricos, despertar el neopopularismo. Mas tarde lo llevaría al plano universal. El Romancero gitano se canta en España como parte intrínseca del folclore nacional. El sentimiento tradicionalista en su obra lo hizo centro del afecto de la España que recorrió con sus compañeros de La Barraca, esa era la España de Impresiones y Paisajes. La de Francisco Franco y Largo Caballero, la de José María Hinojosa y Rafael Albertí le respondió con una bala en la cabeza. La política, la apasionada y virulenta España, esa a la que Lorca jamás calculó, lo asesinó y posteriormente manipuló su imagen. Lorca cenaba con Primo de Rivera, fue cofrade activo en Granada de Santa María de la Alhambra y asistió a reuniones donde su amistades cantaron La Internacional. Federico era totalmente español-como en cierta ocasión declaró-pero también dijo y demostró que era hermano de todos los hombres.
Por encima de todo esto su poesía y su teatro lo destacaron como figura representativa de España. Dictó conferencias en América y en Nueva York escribió su libro más crudo y desgarrante, su primera impresión de la muerte mecanizada que adoptó un matiz surreal. Los meses que vivió en esta ciudad la confusión y el frío espiritual de una época en marcha hacia la deshumanización no le impidió expresar con claridad el futuro, que de cierta manera es la poesía.
De toda su obra quizá Poeta en Nueva York es la que más nos identifica con él y no podemos evadir pensar que esta ciudad, caracterizada por la violencia y la gélidez total le hubiese permitido existir libremente para llevar a aquella España que lo asesinó a niveles más humanos y universales por medio de la literatura. Sesenta y cinco años después de caminar por estas calles, desde Nueva York STET presenta este homenaje como testimonio de que Lorca jamás nos ha abandonado.